Obelisco-5

Obelisco-4

Obelisco-3

Obelisco-2

Obelisco-1

Concurso-obelisco

La propuesta se fundamenta en la articulación de las dos problemáticas que caracterizan el proyecto:
La redefinición de la relación entre el obelisco «monumento» y la ciudad por un lado y la estructuración de las nuevas actividades comerciales a implantar en relación a los sistemas circulatorios existentes.
El proyecto  se estructura a partir de dos operaciones simples pero categóricas que articulan las dos escalas de la intervención y la disímil estructura funcional de la actividad comercial y el monumento símbolo.
La unificación del nivel del piso donde se apoya el monumento y el socavado de dos patios urbanos, al norte y al sur del obelisco, tensan de punta a punta la totalidad de la intervención, el espacio público y la actividad comercial.
Esta idea de unificación del nivel de  apoyo del monumento apunta a simplificar y potenciar la relación entre el obelisco y el piso, casi como «clavar una bandera en la tierra», sin elementos mediadores, sin elementos intermedios ni recinto, solo «clavar una bandera», como evocación primitiva del acto fundacional.
El piso único de la plaza de la república se materializa en porfido patagónico  como continuidad material de la avenida corrientes mientras que los patios contienen el único verde del conjunto de manera controlada y contenida.
Los dos patios longilineos organizan por debajo la actividad comercial, y se relacionan con la plaza de la república y de norte a sur a través del pliegue  del  solado en grandes escalinatas de fuerte impronta urbana.
Ambos patios, uno al norte y uno al sur del obelisco, son el nexo «vital» entre la escala monumental y la escala peatonal y comercial.
Los patios potencian la capacidad del sitio para la reunión de los ciudadanos en recintos de escala pertinente.
El patio norte, está caracterizado por el movimiento, la caída del agua y vegetación verde intenso «bahavimias candicans» de improvisación natural misionera caracteriza la región norte del país.
El patio sur caracteriza la zona patagónica a través de una vegetación típica (notros, embothrium coccineum) y piedras y agua.
El paseo comercial se organiza alrededor de los patios y fluye hacia ellos  como expansión natural, estructurando todos los locales alrededor del mismo y consolidando un verdadero centro turístico y actividad comercial.